Etiqueta: shiva

diciembre 9, 2018 0 Por Alberto Buscató Vázquez

Parte VI: Rajastán, hogar de maharajás y maharajinas

Historias del Rajastán: El sati, o sacrificio de las viudas, es un ritual por el cual la mujer (viva) de un hombre fallecido se arrojaba a las llamas de la cremación de este, para morir con él. Normalmente, ingerían drogas para soportar el dolor y facilitarles tomar la decisión y, en ocasiones, se dice que la droga servía para obligarla a cometer el suicidio. Era propio del Rajastán, que siempre ha sido tierra de guerreros, cuyas muertes eran por ello frecuentes.

diciembre 2, 2018 0 Por Alberto Buscató Vázquez

Parte IV: Varanasi, la ciudad más sagrada del mundo

“Callejuelas estrechas, serpenteantes, pavimentadas con viejas piedras de río que brillaban de una pátina producida por los pies de innumerables generaciones de peregrinos atravesaban el corazón de la ciudad. Una ciudad donde las vacas tenían preferencia desde el alba de los tiempos, y que recorrían santones con el cuerpo cubierto de ceniza y el cabello enmarañado, campesinos recién casados con sus mujeres del brazo, abuelas con sus nietos y ancianos que venían de muy lejos para llegar al templo de Vishwanath, el señor del Universo. Una ciudad considerada el lugar más sagrado del mundo por los fieles hindúes”

octubre 14, 2018 5 Por Alberto Buscató Vázquez

Lo que Cristo no entendió

La postura de rezo cristiano, con las manos juntas sobre el pecho es la posición de namasté india, con la cual se siguen presentando a día de hoy los devotos ante sus dioses; la trinidad cristiana (Padre, hijo y espíritu santo) recuerda en su formulación a la trimurti Hindú (Brahma, que es padre; Shiva y Visnú); la idea de Dios encarnado en un cuerpo humano (es decir, en Cristo) responde al concepto de avatâra en la India, de donde deriva la palabra avatar; Shiva, el dios de la destrucción, recuerda enormemente al demonio cristiano, ya que es un ser que porta un tridente y danza en un círculo de fuego mientras que, impasible, provoca la muerte de los hombres (y demás seres vivos). Hasta el propio nombre de Cristo no parece ser más que la pronunciación aramea del siglo I del nombre de Krishna, uno de los avatâra de Visnú, quien se encarna en un cuerpo humano para traer «la buena nueva».